2017 en PiiiLA: Mejores discos del año
Kristel Latecki
Este 2017, en nuestro primer año de vida online, ha sido un hermoso año para la música uruguaya. Salieron discos que nos desafiaron como escuchas; que nos inspiraron a investigar y explorar más; que nos conmovieron y nos hicieron bailar; que nos embelesaron con sus melodías y nos ayudaron a canalizar nuestras emociones.
Hubo muchísima música excelente, tanto que no pudimos elegir solo 10. Es por eso que esta lista se viene recargada de 15 discos uruguayos. Muchos son discos debuts, otros son segundos lanzamientos, y otros tantos son quintos, octavos en carreras intachables. Y son, en la mayoría de los casos, álbumes que dan un vistazo hacia el futuro de la música local.
Solo resta esperar que el próximo año sea mejor que este.
1) Pactos - Alfonsina
Pactos es el disco de una artista que se encontró a sí misma y que trabajó arduamente para plasmar su sensibilidad en un arte completo. Su música es original, personal, rica en su simpleza, y es a su vez acompañada por un arte visual y shows imponentes. Todo cierra.
Es un disco que captura a Alfonsina en un emocionante e inspirador momento creativo. Pero además, es un álbum que llega con aires renovadores, y abre un alternativo e interesante camino en el rock nacional. Solo hay que seguirla para ver hacia dónde irá.
"Pactos es un excelente disco y totalmente diferente al antecesor. Es una cara diferente de Alfonsina, una que en aquel debut quedó oscurecida u oculta por las inseguridades. Ya no hay jazz ni blues, sino que el pop se llevó a la parte más indie o moderna del espectro. Hay tiempos irregulares, arreglos de vientos que se adueñan la melodía y una voz que apuesta a crear texturas más que demostrar destreza. Hay más poesía que narrativa. Y hay una simpleza que permite que cada una de sus partes se luzca con más fuerza. Esta es Alfonsina, ahora sí, en control".
2) El sonido bendito - Los Nuevos Creyentes
El primer disco de Los Nuevos Creyentes comprobó lo que se había podido vislumbrar en 2015, cuando editaron su EP debut: que se trata de una banda sólida e interesante, que con buen gusto sabe mezclar influencias, y que tiene la capacidad de hacer tanto un tema climático y psicodélico como un hit rockero de melodía pop, una balada emotiva o incluso introspectiva.
Es un proyecto que hace muchas cosas bien: una versión actual del rock psicodélico y garagero de los 60, una rica variedad de canciones y estados, y haber cultivado un sonido particular, dado por la voz de Matías Singer y el teclado de Santiago Bogacz.
"Los amarres que mantienen los pies en la Tierra y hacen que su psicodelia sea algo particular, pueden ser sus letras, un estribillo pegadizo, un riff que invita al baile o al agite.
El sonido bendito de Los Nuevos Creyentes, como su nombre indica, bendice a los oídos con un excelente y diverso material".
3) Desastres Naturales - Franny Glass
Ver la evolución de un artista es siempre interesante, más cuando los resultados continúan sorprendiendo y emocionando. En el quinto disco de Franny Glass, Gonzalo Deniz se propuso experimentar con nuevos instrumentos y sonidos; con su composición y su lírica. El resultado de sus pruebas fue el hallazgo de nuevas y bellas maneras de crear canciones, unas que sin dudas lo llevarán a nuevos horizontes.
"Sumar elementos electrónicos era en papel el gran cambio que Gonzalo incorporaría a su sonido, uno que podría haber llevado su proyecto hacia lugares más obvios o menos interesantes. Sin embargo, los sintetizadores, las bases loopeadas, las baterías programadas no fueron más que elementos que condimentaron sin sobreponerse; que trabajan en función de lo que siempre importa, que son las sutilezas de la composición y la letra. Pero también fue gracias a esos elementos que Franny Glass consiguió presentar las canciones más interesantes y creativas de su etapa más reciente, unas que ya consiguieron destacarse entre lo mejor de su excelente discografía."
4) #8 - Buenos Muchachos
Buenos Muchachos decidió no titular este disco, y dejar que las canciones hablen por sí solas. Y lo que dicen es profundo, atrapante, reflexivo y bello. Hablan -más destacadamente- de una banda que en su octavo disco, y en sus casi treinta años de carrera, se encuentra en un momento de inspiración creativa. En el que continúa creciendo y encontrando nuevos ribetes interpretativos, nuevos lugares compositivos y haciendo propias influencias actuales.
Sus canciones, muchas de ellas, van evolucionando dentro de sí mismas, cambiando, retorciéndose y desde una calma inquieta saltan a un vacío explosivo. No hay caos experimental ni atmósferas donde los límites se difuminan, sino que cada pieza, cada instrumento, cada palabra tiene su lugar. Sus intervenciones, así, son más importantes y claras que nunca. Incluso también lo son los silencios.
El octavo disco de Buenos Muchachos es un excelente trabajo dentro de una discografía envidiable, y que reafirma a fuego su lugar como una de las bandas contínuamente interesantes y sensibles del rock actual.
5) Lechiguanas - Dani Umpi
Lechiguanas es el regreso de Dani Umpi a uno de sus espacios más naturales: la pista de baile. Pero más importante, es además una demostración de que lo suyo mejora con los años.
Con la producción del argentino Jean Deon, sumó a sus excelentes letras una nueva sofisticación synth pop, ofreciendo tanto hits que van directo al blanco, como momentos más narrativos.
"Con solo ocho canciones Lechiguanas es un trabajo concentrado y ajustado, que avanza sonoramente, explora nuevos rincones y saca lo mejor de todo.
Hacer canciones que logren hacer bailar y emocionar no es una tarea fácil. Más bien es bastante difícil, y tal vez sea algo que se consigue con suerte vez por disco. Sin embargo, Dani Umpi una vez más demuestra ser un verdadero artesano, singular y efectivo. Uno que construye con facilidad ese delicado artilugio que es la canción pop".
6) Mandrake y los Druidas - Mandrake y los Druidas
"Comienzos, comienzos / Cómo odio a los comienzos", canta Alberto "Mandrake" Wolf al principio de su disco debut junto a su nueva banda, los Druidas. Sin embargo, en este comienzo en particular, los sentimientos que genera son definitivamente opuestos.
Mandrake, un inquieto musical, siempre fue considerado y se consideró un mestizo, pero ahora no cabe ninguna duda que lo suyo también es el rock. Junto a los Druidas -destacadísimos músicos 20 años menores que él- creó un potente sonido que revive a su manera el hard rock y blues de antaño, con su identificable voz acompañando perfectamente. Entre sentidas baladas como Estos son los días; blues pesados como Hombre rana o más animados como Si no me hubieses conocido nena; y también rocks más melodiosos como Aunque estemos mal y Techo de estrellas, Mandrake y los Druidas se manejan como pez en el agua. Como si este encuentro espontáneo entre músicos no hubiese sido para nada fortuito.
Se trata de un gran debut, que se suma como un excelente ejemplar a una carrera tan variada y extensa como la suya.
8) Temporal - Las Cobras
La historia de Las Cobras es tan interesante como profundamente uruguaya. El dúo conformado por la pareja Sofía Aguerre y Leandro Rebellato comenzó a hacer música gracias al aburrimiento veraniego en su Canelones natal. Leandro ya tenía la experiencia con bandas como Ufesas y Color Horror, y Sofía aportó la intuición y su voz. Y lo que lograron en su casa fue un disco que terminó siendo publicado por el sello inglés Fuzz Club gracias a las vueltas de internet.
Lo que vieron en ellos estos expertos de la psicodelia fue lo que también los hizo el debut del año. Su psicodelia esta arraigada en el ritmo, y tiene su cenit en el bajo cumbiero que lleva la cadencia en Al más allá. Sus canciones se arman a fuerza de limpios sintetizadores y guitarras a puro delay y reverb. Y son excelentes conductores de viajes y alquimistas de climas, hecho que se comprueba en la tormenta que hierve sin explotar en Temporal.
En menos de un año Las Cobras logró un sorprendente y redondo debut, y también sacudir definitivamente la modorra canaria.
8) Palabra clásica - Florencia Núñez
Pocos son los artistas uruguayos que tan abiertamente anuncien su intención de hacer un disco pop como Florencia Núñez. Luego de su primer disco (Mesopotamia, 2014), Florencia decidió alejarse de las categorías indie/folk que la habían caracterizado en su momento y trabajar en canciones que utilicen el pop como herramienta, mas no como muleta.
Junto a Guillermo Berta creó un pop sensible, basado en su oficio como cantautora. Sus canciones tienen nuevos ropajes: una más rica instrumentación, apoyada en secuencias, y ritmos más bailables desde la silla. Pero no perdió lo que la hizo única en el principio: su afán por contar historias de amor, y su narrativa detallada y anclada en los dilemas y los hábitos contemporáneos. Y además, suma temas como Palabra clásica, una preciosa canción sobre el acto de la composición que es uno de los puntos fuertes del disco y el que le dio su nombre. O la hermosa Pacto, tema que en 2015 recibió el Premio Nacional de Música.
Palabra clásica es un disco más maduro, menos ingenuo que su antecesor, y con su pop personal y atemporal demostró que no estaba errada al cambiar de rumbo.
9) Tambor del Cosmos - Campo
Campo nació como un proyecto de laboratorio, y la formula con la que comenzaron a experimentar fue la de la cumbia pasada por el tamiz del pop. Mucho ha sucedido desde su disco debut, tanto que el género de la cumbia pop se transformó en uno de los más populares del país. Pero ese tiempo también hizo que el proyecto cambiara.
Ahora como un grupo, Campo creó un segundo disco desde un pop con perspectiva internacional, que muestra un perfeccionamiento de aquella formula inicial. Los ritmos latinos apenas se asoman en canciones como Bailar quieto o Tambor del cosmos, donde el reggaetón se aletarga y se le resta su contexto nocturno. Más que nunca, todas las influencias se mezclan hasta lograr una Pangea de sonidos; pero de estos nuevos experimentos no dejan de destacarse aquellos que llevan una célula uruguaya: Color, un candombe deconstruido, y Wasted, tema con letra en inglés y un sample de guitarra de Jaime Roos. La música de Campo puede dar mil vueltas al mundo pero siempre termina luciéndose en lo que lo hace único: su conocimiento de los ritmos populares uruguayos.
10) Fuera de la Realidad - Otro Tavella & Los Embajadores del Buen Gusto
Santiago Tavella dijo que las canciones que componen este disco han sido trabajadas durante cinco años. Que como el vino, fueron añejándose y mejorando. Lo cierto fue que 2017 fue un buen año de cosecha para este miembro de Cuarteto de Nos que decidió finalmente editar sus canciones solistas junto a su banda.
Fuera de la realidad muestra un costado menos humorístico que se ve más claramente en Cuarteto de Nos y realza el lado más artístico e inquieto de Tavella. Aunque, por supuesto, el humor nunca desaparece del todo. Se ve en historias como en Sacerdotisa de Afrodita o Baile de mierda, o en guiños de El amor es de nadie. Pero la canción nunca está al servicio del chiste.
Aquí Tavella musicaliza poemas y fragmentos de novelas; en sus letras ocurrentes e inteligentes se imagina, más que nada, historias de amor; y su música deambula en un alto nivel de eclecticismo. Todo esto se pone en práctica en su primer corte: Un amor cualquiera. Basado en un fragmento de La ingenua libertina de Colette, es un verdadero hit de estribillo efectivo, un punto altísimo en un disco que se degusta y se bebe hasta el final.
11) Excelentes Nadadores - Excelentes Nadadores
En su debut, Excelentes Nadadores dejaron un interesante ejemplar de pop alternativo con sutilezas, dos voces casi inexpresivas y particulares, y unos leves toques de humor. Esto resultó en una combinación que los colocó dentro del grupo de discos más interesantes e ineludibles del año.
"Excelentes Nadadores ofrecen una mezcla de melodías a lo Belle and Sebastian cruzadas con la extrañeza montevideana; teclados que suenan como música de ascensor, riffs y estribillos coreables. Sus canciones hablan de historias mundanas de triunfos futbolísticos de Uruguay contra Bolivia vistos desde un bar en Florida (5 gol), detallan una serie de sucesos que pueden suceder o terminar en galpones (la pegadiza Los galpones), narran una suma de escenas ambientadas durante la dictadura (Militancia sideral), o crean con la reiteración de una letra simple un mantra afligido (Autocirugía cardiovascular).
Con estas canciones Dansilio se une definitivamente a Pau O'Bianchi y Federico de Julen y la Gente Sola a la lista de voces particulares y reconocibles del indie local, con inflexiones inesperadas y una interpretación directa. Pero es también gracias a los complementarios coros de Karen que la banda consigue otras distintivas texturas sonoras".
12) El pueblo del terror - Las Valerias
Flavio Lira y Fede Morosini son dos de los mejores cantautores que el indie nos dejó: confesionales, directos, originales y sin pelos en la lengua. Por eso, una unión entre ambos solo puede sacar buenos temas.
Su segundo álbum como Las Valerias podría considerarse conceptual. Es, después de todo, un compendio de canciones sobre personajes de terror, vistos desde la óptica que solo estas dos personas pueden ofrecer. En lugar de llevarse a cabo en castillos abandonados o altillos llenos de telas de araña, sus historias suceden en esquinas del barrio, con jóvenes que no envejecen y toman bebidas demasiado rojas. Con una madre que se preocupa por su hijo adolescente, que en lugar de pasar por los clásicos dolores de crecimiento, todas las lunas llenas se transforma en hombre lobo.
Pero más allá del humor, que se hace muy y oportunamente presente, las canciones son preciosas gemas de indie pop, con perfectas melodías y armonías de voces, que combinan a la perfección con lo tétrico y terrible de sus letras.
13) Solar - Lucía González
Si el debut de Lucía González (2012) había sido un trabajo casero y a puertas cerradas junto a su dupla creativa, Gabriel Casacuberta, su segundo disco demuestra una apertura sonora y una mayor fusión de elementos. Esto sucede en parte gracias a la participación de su banda, conformada por muchos de los miembros de Adan Yeti, cuya influencia psicodélica se unió a la perfección a la sensibilidad pop y al oído melómano del dúo. Esto hizo de Solar un disco más uniforme, difícil de encasillar y cautivante en su riqueza.
En Solar, Lucía encontró el sonido que buscaba y le sienta mejor. Elaboró un encantador mundo sonoro, donde el pop se cruza sutilmente con la psicodelia, creando un ambiente de colorido cósmico. Sus canciones cuentan de amor, de playas brillantes en la noche, de árboles de níspero y jardines en flor; de viajes espaciales de la mano de un romance. Mientras que su voz se desliza en un susurro, como si no quisiera alterar esos delicados ecosistemas musicales.
14) Están padentro - Los Zalvajes
Los Zalvajes hablan de "estar padentro" como un sentimiento de introspección. Sin embargo, su primer disco no tiene nada que ver con ese estado, sino que se compone de 9 temas donde el arrojo, la diversión e incluso la opinión política brillan.
Su particular sonido se compone de partes de krautrock, una dosis generosa de suciedad garagera, cierta actitud post punk y el toque final de un perfecto y lisérgico teclado. Y es en gran parte gracias a la repetición de sus letras y melodías, y la combinación de una firme base rítmica, una guitarra descontrolada y su teclado, que Los Zalvajes ganan identidad y originalidad.
Con grandes temas como Viva la joda, su versión de La Modelo de Kraftwerk y Volqueta, la banda se ubican entre lo más emocionante del rock independiente.
15) Todas las mentiras que querías escuchar - Desayuno Continental
Todas las mentiras que querías escuchar, la canción que le da el nombre rimbombante y extrañamente sincero al disco debut de Desayuno Continental, dice -tal vez sin planearlo- todo lo que hay que saber de esta banda: "no me tomes en serio, soy un comediante".
Santiago Pepe, voz y letrista de esta banda, se encargó de realizar un compendio de versos ingeniosos y con clara habilidad para la comedia. En Braian Skywalker el protagonista es un plancha que busca a su padre, en El mago el protagonista del romance parece no ser muy buena persona. Y en El lado oscuro, su versión de Getcha Back de los Beach Boys, a lo que se refieren es ir a ver a Peñarol. El golpe de efecto son sin dudas sus letras, pero su música, una mezcla de pop y post punk de los 80, hace que todo funcione a fuerza de melodías y cierta retromanía.
Esta serie de pequeñas y muy buenas mentiras, es el gran momento de sinceridad y franqueza el que resalta como el mejor track del disco. En Ustedes acusan al escucha, entre muchas cosas, de escuchar música de mierda. Puede ser. Nosotros no vamos a mentir.