Louta llega a derretir Montevideo

Kristel Latecki

[Actualización 4 de abril: el show de Louta en La Trastienda. La devolución de entradas se realiza a través de Red UTS] 

 

Louta es un personaje de vestuario serio y estricto peinado, que tiene su propio vocabulario con frases rimbombantes que usa como muletillas y cierta afición por el emoji de choclo. 

Louta es Jaime James, argentino de 23 años que se crió en el teatro, pero no de un teatro cualquiera: sus padres son el creador de Fuerza Bruta, Diqui James y la bailarina Ana Frenkel. Si su padre se propuso romper con la estructura clásica del teatro –quitar el escenario, incluso las palabras- y ofrecer un espectáculo innovador, Jaime eligió la música, deconstruyó el típico show en vivo y al arquetipo mismo del músico, y al igual que aquel emoji que casi nadie debe usar en la vida cotidiana, logró una propuesta bastante excepcional. 

Su objetivo es ofrecer un show que rompa las cabezas del público. Mezcla acciones callejeras -como ir con un cartel de su imagen en tamaño real y posar con él en diferentes puntos bonaerenses-, con sus presentaciones en vivo, que hicieron que en apenas dos años se transformara en una de las figuras más atractivas de la escena emergente argentina.

Su primer disco se compone de una mezcla de géneros musicales puramente millennial, que va desde la electrónica a la cumbia villera sin escalas ni contradicciones, con de letras sin sentido pero pegadizas. Su puesta en escena emula un living sumamente normal, y es dentro de él que se suceden las canciones y sus extrañas coreografías. 

 

Venís de una familia del teatro, ¿qué te llevó a inclinarte por la música y hacer un disco?
Tenía muchas ganas de poder generar algo. Siempre tenía ideas y todo, y tuve la necesidad de elegir una cuestión concreta para poder plasmar todo lo que me pasaba.

Tu show en vivo tiene su escenografía, un personaje, una sucesión de escenas. ¿Lo planteaste como una obra de teatro?
La verdad es que lo fui resolviendo a medida que iba pasando. Yo creo mucho en arrojarse a hacer algo y resolverlo en la medida que uno lo hace. Y en algún punto creo que descubrí esa creatividad en el momento que tuve que encarar un show en vivo.

¿Cómo fue ese primer show?
Medio raro, digamos. Cantaba otro chabón también. Tiramos las pistas, tocamos un par de instrumentos, muy diferente a lo que es ahora. Después en la medida que fuimos haciendo todo se fue armando.

En aquel primer show ya tenias el uniforme de Louta, ¿cómo se armó ese look?
Pintó en el momento. Una amiga había traído ropa vieja que tenia y en el momento elegimos la celestita. Ganó por votación de los que estaba en el camarín.

¿Cuál fue el show que concretó todo perfeccionó la idea de Louta?
El show de Lollapalooza fue muy grosso, nos permitió ver un montón de cosas, porque había mucha gente, gente que no nos conocía y explotó, ¿viste? Ahí cayeron un par de fichas.

Empezaste en la música como DJ...
Sí, eso está bueno, porque te hace aprender mucho los movimientos de la pista. Eso me hizo conectarme con la música de otra manera. El DJ es naturalmente productor, porque escucha la música a través de la gente.

¿Qué música te copaba pasar?
Me gusta mucho Gorillaz, Groove Armada, pero también me copa pasar en una pista cumbia villera, reggaetón, me copa todo. De repente poder tirar un tema de los Beatles re colgado y mezclarlo con otra cosa. Que sea medio cambiante todo el tiempo.

Y el disco en realidad el disco es así. ¿Vos mismo escuchás la música de esa manera entonces? ¿Yendo de la cumbia villera al rock?.
Sí, a full. Eso me refleja.

Estás trabajando en tu segundo disco, ¿qué podés contar? ¿Cuándo saldrá?
Estoy cebado. Creo que voy a sacarlo por temas, me parece. En un mes sale un temita.

¿Acá en Montevideo va a aparecer algo nuevo?
No (risas). Posta estoy contento, para mi ir a Montevideo es alta alegría mal. Estoy recontra cebado, quiero conocer un poco la gente, la movida de ahí, encontrarme con todos. Y estamos viendo de hacer algunas cosas en la calle. Vamos con todo.