Hablan Por La Espalda: el optimismo y la celebración de una nueva etapa
Kristel Latecki
Afuera, el sexto disco de Hablan Por La Espalda, es el resultado del desafío de cambiar fundamentalmente los cimientos de la banda una vez más. Y es uno que fue asumido con alegría.
Allí hay celebración, hay agite y baile. Y hay una banda que mantiene sus ganas de salir a los escenarios para sacudirnos y decirnos cosas, en forma de 10 canciones concisas y directas, que representan el abanico sonoro que les caracteriza.
Está el candombe (ahora a batería) en la excelente Muchas veces somos huracanes; las guitarras desbocadas, la crudeza y el vértigo acelerado de Brasil 2; el blues popero y ganchero de Fiasco; o Record, la heredera de Macumba.
Los Hablan estarán tocando esas canciones y más hoy en el Festival Febrero, junto Alucinaciones en Familia y Julen y la Gente Sola. Sobre el disco, sus iniciales referencias y la posibilidad abierta de colaborar con otros artistas en el futuro, hablamos con Fermín y Martín Solana.
Afuera es un disco que deja claro el momento en el que se encuentra la banda. Va dejando evidencias en todas las canciones, pero Hay algo afuera es como el manifiesto. ¿Cómo surgió esa canción y esas dos partes que la componen? ¿A qué viene la referencia al libro 1984?
Martín Solana: Hay algo afuera es una de las más viejas. Se puede decir que surgió de una zapada jugando con esas dos notas y la inspiración fue la música jamaiquina. Y después la otra parte fue jugar con eso y llevarlo a un lado más ska o más Clash. Esa fue un poco la referencia musical. Se daban las dos cosas y se decidió en un momento unirlo y que fuera todo lo mismo. Porque era como un preámbulo de lo otro.
Fermín Solana: La referencia es a uno de los libros obviamente más influyentes y que inspiraron a la banda. Básicamente va un poco a tono con lo paranoico de la canción. Nos sentimos así: que la vigilancia se ha ido extremando, que no hay ningún tipo de privacidad ni intimidad real. Hasta captura del pensamiento. Desde que tengo recuerdo veo que va avanzando, pero me parece que ya directamente se fue todo al carajo.
Es esa sensación de la esclavitud al teléfono. En mi caso, soy uno de los principales exponentes porque lo que empezó como simple chiste de que usaba el teléfono para trabajar y comunicar, tiene un giro que te hace estar totalmente atado de manos al celular y nada, es como un chip que nos incrustaron.
Más allá de lo difícil de los cambios que pasaron, el resultado es un disco divertido, medio fiestero. ¿Están de acuerdo con esa afirmación?
FS: De más. Está bueno que se perciba así. Si vas a que podría haber sido un disco de duelo por los cambios que hubo, en realidad fue al revés. La banda tomó el desafío de reestructurarse como algo bastante feliz, como una oportunidad. Algunas de las canciones ya se venían trabajando de antes y otras no. Pero todo se convirtió en otra cosa, en la nueva etapa, cuando cerramos filas con los nuevos integrantes. Nosotros lo sentimos como un renacer, y eso se festeja. Y me parece que también el cambio de energía hizo que se encare el tema de componer y grabar con mucha alegría y optimismo. Y como una cosa súper fresca que se percibe, me parece.
MS: Puede ser sí. Yo me divierto mucho tocando, hemos tocado en fiestas y pasan cosas lindas. Últimamente se ha dado algo muy bueno y es que en el agite hay tanto pibas como pibes. Eso está bueno, que el ambiente sea para todos y todas. Y genera muy lindos climas, está muy lindo lo que pasa con Afuera.
¿Cómo ha sido entonces tocar este disco en vivo? ¿Se pica más el pogo? ¿Sienten que la gente respondió a su crudeza?
FS: Sí, lo hemos tocado por ahora pocas veces, pero la respuesta nos viene sorprendiendo gratamente, porque la gente incorporó las canciones muy rápido. Otras veces los procesos fueron más lentos y la gente tiende a coparse más con lo de antes. Siempre es así (risas). Es más de fan conocer lo viejo de Hablan, ¿viste? Pero en realidad en este caso pasa que se arman tremendos agites y coritos hardcore con temas mismo como Hay algo afuera, así que esta buenísimo. La gente creo que captó perfecto lo que quisimos decir en este disco.
MS: Por suerte ha respondido bien, y habla un poco de la crudeza del disco. Al prescindir de ciertos elementos y volver a las guitarras con todo, se buscó esa contundencia. Y siempre la gente cuando sale un disco nuevo de Hablan a veces no sabe por dónde podemos llegar a ir, se genera una incertidumbre. Y la verdad que la respuesta con este disco ha sido muy buena, así que estamos muy contentos.
Fermín, en Página12 hay una entrevista donde dijiste algo súper interesante sobre la moda del hip hop, el rockero que dice que todo eso es una mierda, y que su postura es querer hablarle a todo el mundo, sin importar el género. ¿Hacia dónde se imaginan que seguirá la mutación de HPLE?
MS: La dirección no la podría decir, porque no estamos en un proceso de tanta composición. Pero siempre la idea es ir siempre, no sé si mutando, pero experimentando con cosas nuevas e ir a lugares que capaz que no hemos ido. Y a la vez afirmando ciertas raíces de dónde venimos.
FS: Creo que Hablan es una banda que es mucho más abierta de que lo que parece o lo que la gente cree. Simplemente somos una banda que nunca se quiso casar con ningún estilo y prueba de eso fue que mutamos pila en estos años. El que recorra un poco la historia de la banda se va a dar cuenta que pasamos por 80 mil etapas. Y también eso es lo que nos mantiene motivados. Creo que ninguno de nosotros se imagina haciendo toda la vida el mismo sonido o copiando una fórmula o a nosotros mismos. Siempre lo he dicho: que si alguna vez alguien se imaginaba que Hablan iba a salir con un disco como Macumba antes de que saliera, que incorporara tambores o vientos, o que después de todas esas mutaciones Hablan pudiera volver a hacer hardcore en temas como Himno del incendio, o incursionar en el reggae y en el dub. Creo que está todo dicho.
Y en hip hop nosotros por ejemplo tuvimos invitados a Contra las Cuerdas hace mucho tiempo…
MS: Sí, cuando festejamos los 15 años hicimos una colaboración en vivo con Contra las Cuerdas en la canción Candombe del temporal. Es un género que siempre hemos escuchado desde Víctimas del Sistema allá por los 90. Acá siempre ha sido grande, pero ahora llegó a otro lugar. Me encanta lo que está pasando y de hecho escucho un montón de hip hop uruguayo. No creo que Hablan haga hip hop, eso seguro. Pero bueno, quién te dice. Hacer colaboraciones y eso puede estar bueno.
En ese sentido, las ganas de probar cosas diferentes también se vio antes en la colaboración con Juan Wauters. ¿Planean o se imaginan en un futuro tener más colaboraciones con artistas de otros palos?
FS: Sí, a mí me encantaría escuchar la interpretación de Hablan Por La Espalda que pudieran hacer otros artistas de otros palos, otros géneros u otros viajes. Mismo escuchar capaz otras mezclas de nuestras canciones.
MS: También está bueno que vengan propuestas de otros hacia nosotros y capaz que ir musicalmente a lugares a los que no hubieses pensado. La verdad que si me lo tengo que imaginar sí, no le hacemos asco a nada. Sí a todo.